Con motivo de la celebración del Día Internacional de la Educación, hay que recordar que esa educación debe ser para todos, incluyendo, entre otros, a las personas con discapacidad o mayores.
De hecho, el ODS 4, dedicado a la Educación de calidad, lo deja muy claro en su definición: “Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad, y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos”. Hablar de inclusión e igualdad es hablar de una educación que no deja a nadie fuera, y ahí es donde encontramos los vínculos del ODS4 con la accesibilidad.
AIS, el certificado internacional del grado de accesibilidad, contribuye a la consecución de este ODS, repercutiendo directamente en dos de sus metas:
- META 4.5: De aquí a 2030, eliminar las disparidades de género en la educación y asegurar el acceso igualitario a todos los niveles de la enseñanza y la formación profesional para las personas vulnerables, incluidas las personas con discapacidad, los pueblos indígenas y los niños en situaciones de vulnerabilidad.
- META 4.a: Construir y adecuar instalaciones educativas que tengan en cuenta las necesidades de los niños y las personas con discapacidad y las diferencias de género, y que ofrezcan entornos de aprendizaje seguros, no violentos, inclusivos y eficaces para todos.
Importancia de la accesibilidad para el ODS4
Los niños o jóvenes con discapacidad tienen más dificultades para recibir una educación, especialmente en países en vías de desarrollo. Las causas son diversas y van desde la falta de accesibilidad de los entornos escolares hasta la carencia de programas de apoyo pasando por los prejuicios sociales o familiares. Según datos de la UNESCO (Qué debe saber acerca de la inclusión en la educación), “entre 93 y 150 millones de niños en el mundo se encuentran en situación de discapacidad”, y “tienen el doble y medio de probabilidades que sus compañeros de no ser escolarizados nunca”.
Por tanto, la adecuación de espacios y la prestación de un servicio educativo accesible, lo que incluye los materiales, el apoyo con facilitadores humanos o la comunicación entre alumnos y docentes, facilitaría la inclusión en el sistema educativo a niños con discapacidad; y en el sistema universitario, a jóvenes con discapacidad. Al mismo tiempo, favorecería el desarrollo de las comunidades al mejorar el acceso de las personas mayores a la educación digital, por ejemplo.
Accesibilidad de los espacios educativos, pero ¿solo en ellos?
Más allá de la educación inclusiva para todos, no se debe olvidar que los centros escolares, en ocasiones, cumplen otras finalidades, como el desarrollo social o el acceso a una alimentación adecuada. Según datos de Naciones Unidas, cerca de 369 millones de niños que dependen de los comedores escolares tuvieron que buscar otras fuentes de nutrición diaria en 2020. Por tanto, cuando se habla de accesibilidad de los colegios no hay que circunscribirse exclusivamente al aula sino incluir algunos servicios que podrían considerarse como secundarios como el comedor, el auditorio o la enfermería.
La educación es, además, esencial para la consecución de otros Objetivos de Desarrollo Sostenible, como poner fin a la pobreza (ODS1), lograr un trabajo decente (ODS8) o reducir las desigualdades (ODS10).
AIS en la educación
La certificación AIS ofrece una evaluación del entorno y servicio educativo en grados de 1 a 5 estrellas, permitiendo establecer prioridades y realizar planes de acción en base a unos objetivos concretos y con una metodología eficiente.