La accesibilidad no es solo una cuestión de inclusión, también es una estrategia clave de gestión de riesgos legales y reputacionales. En edificios de pública concurrencia, como oficinas, hoteles, centros comerciales, hospitales o universidades, es necesario, no solo cumplir la normativa en materia de accesibilidad, sino ir más allá para evitar consecuencias.
Aunque las normativas varían de un país a otro, los efectos legales y reputacionales suelen coincidir en varias dimensiones clave: sanciones económicas, limitaciones administrativas, acciones judiciales y demandas por discriminación, e impacto reputacional y social.
Cuatro dimensiones de riesgos legales por falta de accesibilidad
Sanciones económicas por falta de accesibilidad
Las normativas nacionales e internacionales obligan a garantizar la accesibilidad de los espacios construidos, incorporando sanciones económicas ante su incumplimiento.
Estas multas varían en función del país de aplicación. Por ejemplo, en el caso de España las multas por incumplir el Real Decreto Legislativo 1/2013 sobre accesibilidad y no discriminación de personas con discapacidad varían entre 301 € y 1.000.000 € según la gravedad de la infracción.
Limitaciones administrativas por incumplimiento de accesibilidad
Si un espacio no cumple con la normativa de accesibilidad, dependiendo del país y de la región geográfica, puede enfrentar una denegación o retirada de licencias de apertura y funcionamiento; y clausuras temporales o definitivas hasta corregir las deficiencias.
Por ejemplo, en Chile, la accesibilidad universal es obligatoria para obtener una licencia de apertura o para la construcción de locales comerciales, y se rige principalmente por el Decreto Supremo N° 50 de 2015 del Ministerio de Vivienda y Urbanismo.
Además, las empresas pueden encontrar obstáculos para acceder a certificaciones internacionales (LEED, WELL, BREEAM), que ya incluyen la accesibilidad como criterio.
Acciones judiciales y demandas por discriminación
Un espacio no accesible puede considerarse excluyente y dar lugar a demandas judiciales por parte de personas con discapacidad. Personas con discapacidad o colectivos pueden iniciar demandas civiles alegando trato desigual.
Además, la falta de accesibilidad puede derivar en accidentes: rampas inadecuadas, señalización insuficiente o barreras físicas que comprometen la seguridad. Esto provoca riesgo de indemnizaciones por daños y perjuicios si la falta de accesibilidad genera exclusión o accidentes.

Impacto reputacional y social
La accesibilidad protege a la organización no solo frente a sanciones legales, sino también frente a crisis de imagen o conflictos con colectivos sociales.
Hablamos de denuncias públicas y presión social por parte de asociaciones de personas con discapacidad, cobertura mediática negativa que daña la imagen institucional o corporativa, y pérdida de confianza por parte de clientes, usuarios y socios inversores.
Cómo reducir los riesgos legales de accesibilidad: certificado AIS
La certificación AIS (Accessibility Indicator System), creada y gestionada a nivel internacional por Fundación para la Accesibilidad y la RS, se convierte en una herramienta estratégica para prevenir estos riesgos de carácter legal, demostrar cumplimiento normativo y reforzar la confianza de inversores, clientes y stakeholters en cualquier mercado global.

Certificación: consultoría + auditoría
Optar por AIS es decantarse por un sistema independiente, que permite garantizar el resultado en base a un estándar internacional. El proceso de certificación implica a diferentes actores, que actúan de manera autónoma, ofreciendo un resultado auditado y verificado por Fundación ARS, creadora y gestora a nivel internacional de AIS.
Alto grado de accesibilidad con AIS: mayor seguridad legal
Lo cierto es que cumplir con la normativa no es suficiente, los espacios deben dar un paso más allá y optar por la excelencia, lo que les aporta una mayor seguridad ante cambios normativos y aumento de demandas sociales.
Así, los grados más altos de AIS, las cuatro y cinco estrellas, no solo abren las puertas a todas las personas, sino que también son una garantía para los gestores de edificios: menos riesgos legales, más seguridad jurídica y mayor valor social y económico.

Transposición
El Sistema AIS cuenta con el protocolo de transposición cuya utilidad es precisamente garantizar el compliance. Supone el cruce del estándar AIS Internacional con la legislación concreta de un país, otorgando a la entidad certificada dos certificados, el internacional y el nacional, e informando del grado de accesibilidad del activo tanto a nivel internacional como en comparación con la normativa del país.