Auditoría de accesibilidad: ¿qué es y en qué consiste?

Una auditoría de accesibilidad del espacio físico evalúa si los entornos construidos (como edificios, urbanismo, espacios públicos y privados), y los servicios que en ellos se prestan, están diseñados y adaptados para ser utilizados por todas las personas, incluidas aquellas con discapacidad física, sensorial o cognitiva. Este proceso asegura el cumplimiento de normativas, promueve la inclusión social y fomenta entornos accesibles para todos.

El proceso de certificación AIS incluye la realización de una auditoría de accesibilidad en la base al estándar AIS 1/2023, que recoge y organiza en cinco niveles o grados normativas internacionales y nacionales de todos los países en los que se certifica, UNEs, ISOs, códigos de buenas prácticas…

¿En qué consiste una auditoría de accesibilidad con AIS?

Este proceso consta de diferentes fases, que en el caso de AIS son:

1. Definición del alcance: Se identifican los espacios, servicios y elementos a evaluar. AIS organiza estos elementos en cinco áreas funcionales:
   • Itinerario horizontal: Estudia el desplazamiento horizontal hacia los servicios principales y secundarios. Ej.: puertas y huecos de paso; pavimentos; vados, isletas y viales ciclistas; rótulos y señales…
   • Itinerario vertical: Tiene en cuenta la movilidad frente a desniveles superiores a 55 centímetros y los mecanismos para lograr este desplazamiento de manera autónoma. Ej.: ascensores; rampas; escaleras; otros desniveles; elevadores y plataformas salvaescaleras…
   • Servicios: Analiza las condiciones en que se ofrecen servicios específicos, ya sean principales o secundarios. Ej.: servicios higiénicos; servicios de aparcamiento y transporte…
   • Comunicación e Información: Estudia los elementos que favorecen la orientación, la información y la comunicación al usuario para garantizar la prestación del servicio. Ej.: puntos de atención (mostradores); puntos de llamada (interfonos, timbres…); rótulos y señales en formato convencional o alternativo…
   • Evacuación: Elementos que permiten al usuario realizar una evacuación segura de forma autónoma o asistida en caso de emergencia. Ej.: plan de emergencia; espacios seguros; elementos de alarma y extinción; medidas específicas contempladas en P.E. y PAU.
2. Análisis: La verificación de las condiciones de accesibilidad del espacio se realiza en base a los más de 700 requisitos del estándar AIS 1/2023 y usando una herramienta eficiente creada para este fin: la APP AIS.
   • Revisión documental: Incluye planos, documentos de gestión, planes de emergencia…
   • Inspección física: Técnicos de Campo y Técnicos Homologados inspeccionan y miden los elementos del espacio físico, tomando fotos y evidencias.
3. Informe de resultados: Con las evidencias recabadas y los resultados arrojados por la APP AIS, el Técnico Homologado realiza un Estudio de Accesibilidad, que incluye:
   • Características del espacio y contexto.
   • Los aspectos que cumplen con la Norma AIS y el nivel de accesibilidad al que corresponden de entre los cinco grados del estándar.
   • Requisitos que deben cumplirse para mejorar el grado de accesibilidad.
4. Consultoría: Una vez presentadas las recomendaciones, de forma ordenada la propiedad decide que mejoras implementa con el apoyo periódico del técnico.
5. Revisión por parte de Técnicos Auditores de Fundación ARS: el Estudio de Accesibilidad es auditado, a su vez, por un equipo externo perteneciente a Fundación ARS, que es la entidad creadora del estándar AIS.
6. Emisión de certificado por parte del Comité Dictaminador de la Fundación ARS de 1 a 5 Estrellas AIS.

Ejemplos de errores comunes detectados en una auditoría de accesibilidad:

• Escaleras sin alternativas accesibles, como rampas o ascensores. 
• Baños públicos con las barras de apoyo coladas a una altura inadecuada. 
• Falta de señalización en braille o en alto relieve para personas con discapacidad visual. 
• Estacionamientos sin plazas reservadas, mal señalizadas o sin itinerario peatonal hasta el acceso al edificio. 
• Mesas, mostradores o máquinas expendedoras a alturas no adecuadas. 
• Superficies resbaladizas o mal iluminadas. 

¿Qué ganas con una auditoría de accesibilidad física AIS?

Realizar auditorías de accesibilidad de los espacios físicos y de los servicios que se prestan en ellos y certificarlo con AIS conlleva diferentes beneficios tanto económicos como sociales:

• Cumplimiento legal: Tener la garantía de que el espacio cumple la normativa legal nacional e internacional del país en el que se encuentra el activo. Compliance.
• Revaloriza los activos, haciéndolos más atractivos para inquilinos o inversores.
• Aumentar tu público objetivo, al reunir las condiciones que dotan de autonomía a todas las personas.
• Facilita la creación de planes de acción en materia de accesibilidad eficaces y eficientes, permitiendo organización de CAPEX/OPEX.
• Completa los procesos de Due Dilligence.
• Constituye un nuevo argumento en la captación de fondos de inversión social.
• Desarrollar la S de la estrategia de ESG de tu empresa y ganar puntos en el ranking internacional GRESB
• Mejora de la experiencia: Los espacios accesibles son más cómodos y seguros para todas las personas, incluyendo familias con carritos de bebé o personas mayores.
• Cumplir con los ODS y la Agenda 2030.
• Integrar la accesibilidad en tus estrategias de Responsabilidad Social.
• Desarrollar entornos inclusivos que favorezcan tus planes de DEI (Diversity, equity and inclusión).
• Ofrecer la oportunidad de participar en la sociedad a todas las personas con el mayor grado de autonomía posible y favorecer la libertad de elección de los usuarios.

Realizar auditorías de accesibilidad en base a la Norma AIS 1/2023 y certificar los espacios no solo es un acto de responsabilidad social, sino una forma de garantizar entornos más funcionales, inclusivos y respetuosos para todas las personas.

Si gestionas un espacio público o privado, además de realizar una auditoría puntual y gestionar tu certificado AIS, considera realizar auditorías periódicas, que corresponden al Protocolo de Mantenimiento Anual de AIS, para detectar y corregir problemas de accesibilidad antes de que generen inconvenientes o incumplimientos legales.